• Jackie Chan arrasa en China con «The Shadow’s Edge», alcanzando el número 1 de taquilla en su segundo fin de semana con 25,4 millones de dólares.

• A los 70 años, Chan demuestra que la experiencia bien aplicada puede ser más valiosa que cualquier efecto especial en el mercado asiático.

• El mercado chino crece un 17,9% interanual, confirmando su papel como termómetro de la industria cinematográfica mundial.

¿Quién dijo que los héroes de acción tienen fecha de caducidad? Jackie Chan acaba de demostrar una vez más que en el mundo del cine, los números no mienten, y los suyos siguen siendo espectaculares.

Mientras Hollywood se debate entre superhéroes y secuelas infinitas, el mercado chino nos regala una lección magistral de cómo un veterano puede seguir dominando la taquilla con la fórmula correcta.

Los datos que llegan desde el gigante asiático no solo nos hablan del éxito de una película, sino de las tendencias que están marcando el futuro de la industria. Porque cuando China estornuda, el resto del mundo cinematográfico se resfría, y ahora mismo parece que está en plena forma.

El Rey Sigue en su Trono

«The Shadow’s Edge» no es solo otra película de Jackie Chan; es una declaración de intenciones. En su segundo fin de semana, la cinta dirigida por Larry Yang se alzó con el primer puesto de la taquilla china, recaudando la friolera de 182,9 millones de yuanes (25,4 millones de dólares).

Sumando ambas semanas, el filme ya acumula 77,5 millones de dólares. Una cifra que haría sonrojar a más de una superproducción occidental. Chan, interpretando a Wong Tak-Chung, un experto en vigilancia retirado de Macao, ha encontrado el equilibrio perfecto entre nostalgia y modernidad.

La trama gira en torno a un atraco de alta tecnología orquestado por un criminal conocido como el «Rey Lobo». Es puro Chan: acción, tecnología y ese toque de vulnerabilidad que solo él sabe imprimir a sus personajes.

En mis años analizando taquillas, he visto cómo muchas estrellas de acción intentan reinventarse sin éxito. Chan lo hace de manera natural, adaptándose a su edad sin perder carisma.

Un Mercado que No Conoce la Crisis

El éxito de Chan no es un caso aislado. El fin de semana completo en China generó 78,3 millones de dólares, con un crecimiento del 17,9% respecto al año anterior.

Mientras otros mercados luchan por recuperar los niveles pre-pandemia, China no solo se ha recuperado, sino que está creciendo a un ritmo que da vértigo. Es la demostración palpable de que cuando un mercado cinematográfico tiene las condiciones adecuadas, el público responde.

«Nobody», la animación inspirada en «Viaje al Oeste», y «Dead to Rights», el drama histórico ambientado durante la Masacre de Nankín, completan el podio. Incluso «Destino Final: Bloodlines» encontró su hueco, demostrando que la diversidad de géneros sigue siendo clave.

La Fórmula del Éxito a los 70

Lo que más me fascina de este fenómeno es cómo Chan ha sabido reinventarse sin perder su esencia. A los 70 años, cuando la mayoría de actores de acción ya han colgado las botas, él sigue encontrando la manera de conectar con audiencias multigeneracionales.

«The Shadow’s Edge» no es una película de nostalgia; es una evolución inteligente. Chan ya no necesita colgarse de rascacielos o saltar entre autobuses. Su carisma y la elección inteligente de proyectos hacen el resto.

El personaje de Wong Tak-Chung representa perfectamente esta transición: un veterano que vuelve al ruedo no por ego, sino por necesidad narrativa. Es Chan hablando directamente a su público, diciéndoles que la experiencia también puede ser espectacular.

Recuerdo cuando analicé los números de «Rush Hour» hace décadas. Ya entonces Chan demostraba una capacidad única para adaptar su fórmula a diferentes mercados. Ahora, con 70 años, esa habilidad se ha refinado hasta convertirse en arte puro.

El Contexto Global

Estos números cobran relevancia cuando los ponemos en perspectiva global. Mientras Hollywood experimenta con fórmulas cada vez más complejas y presupuestos astronómicos, el mercado chino nos recuerda que la clave está en la simplicidad bien ejecutada.

El crecimiento del 17,9% interanual no es casualidad. Es el resultado de una industria que ha sabido combinar contenido local de calidad con distribución inteligente. Jackie Chan se convierte en el embajador perfecto de esta filosofía.

La lección es clara: en un mundo saturado de contenido, la autenticidad sigue siendo el mejor algoritmo. Chan lo sabe, China lo entiende, y los números lo confirman.

Jackie Chan y «The Shadow’s Edge» nos han regalado una masterclass sobre cómo mantenerse relevante en una industria que cambia a velocidad de vértigo. Los 25,4 millones de dólares de su segundo fin de semana no son solo una cifra; son la confirmación de que el talento, bien gestionado, no tiene fecha de caducidad.

En un mercado tan competitivo como el chino, donde cada fin de semana es una batalla campal, Chan sigue demostrando que conoce las reglas del juego mejor que nadie. El crecimiento del 17,9% del mercado chino debería hacer reflexionar a toda la industria global: cuando se combinan historias sólidas, estrellas carismáticas y distribución inteligente, el público responde.