• James Gunn ha confirmado que la secuela de Superman será una película de la «familia Superman» con apariciones de Supergirl y Krypto desde el segundo filme.
• Brainiac podría debutar finalmente en acción real como villano principal, algo que llevamos esperando décadas los fans de DC.
• Este enfoque coral desde tan temprano marca una diferencia clara con anteriores intentos del DCU y podría ser la clave del éxito.
Cuando James Gunn tomó las riendas del nuevo DCU, muchos nos preguntamos si realmente conseguiría algo diferente. Después de años viendo cómo se desmoronaban universos antes de consolidarse, sus primeras pistas sobre la secuela de Superman sugieren que no solo tiene un plan, sino que está pensando en grande desde el principio.
Lo más fascinante es cómo está construyendo este universo: no como películas individuales que eventualmente se cruzan, sino como una saga familiar desde el segundo filme. Una apuesta que podría cambiar completamente lo que esperamos de una película de Superman.
La familia Superman desde el arranque
Lo que más me llama la atención es su insistencia en llamarla una película de la «familia Superman». Mientras otras franquicias tardaron años en construir sus equipos —los Vengadores llegaron tras cinco películas individuales—, Gunn acelera el proceso deliberadamente.
La inclusión temprana de Supergirl (Milly Alcock) y Krypto tiene sentido narrativo. Superman funciona mejor cuando no carga solo con el peso del mundo. Tener a Kara como compañera kryptoniana añade una dimensión emocional que pocas adaptaciones han explorado realmente.
Y Krypto no es solo un elemento cómico. En las mejores historias, representa la humanidad de Clark, su capacidad de proteger incluso a los más vulnerables. Es un detalle que habla bien de la comprensión que Gunn tiene del personaje.
Recuerdo cuando leí por primera vez «All-Star Superman» de Morrison y me flipó cómo incluso en las historias más cósmicas, los momentos más potentes eran los más íntimos. Gunn parece entender esa dualidad.
Brainiac: por fin en pantalla
Si hay algo que me emociona especialmente es la posible llegada de Brainiac. Es casi incomprensible que uno de los villanos más icónicos nunca haya llegado al cine. Hemos tenido Lex Luthor múltiples veces, Zod, Doomsday… pero nunca al Coleccionista de Mundos.
Brainiac representa algo único. No es solo amenaza física como Zod, ni rival intelectual como Luthor. Es conocimiento sin humanidad, lógica fría al extremo. Para Superman, que encarna esperanza y compasión, enfrentarse a quien ve la vida como datos es profundamente personal.
Gunn demostró con Guardianes que sabe manejar villanos cósmicos sin perder el componente emocional. Si se inspira en storylines de 2008 que involucran a Jonathan Kent, entiende que las mejores historias de Superman vuelven a sus raíces humanas, incluso con amenazas intergalácticas.
El contexto perfecto para DC
Este enfoque encaja perfectamente en la visión de Gunn para DC. Después de años intentando competir con Marvel copiando su fórmula, finalmente tenemos a alguien que entiende que DC funciona mejor abrazando lo que la hace diferente.
DC siempre ha sido más mitológico, más operístico. Sus personajes son arquetipos, dioses entre nosotros. Una película de la «familia Superman» con amenazas cósmicas se siente más auténtica que los intentos anteriores de hacer todo más «realista».
El timing es perfecto. Con Supergirl programada para junio de 2026, Gunn tiene tiempo de establecer a Kara independientemente antes de unirla con Clark. Es la planificación a largo plazo que el DCU necesitaba desesperadamente.
Como alguien que vivió la decepción de «Liga de la Justicia» en 2017, ver esta construcción metódica me da esperanza real.
Mirando hacia adelante
Todo son especulaciones basadas en pistas, pero son prometedoras. Gunn sabe equilibrar corazón y espectáculo, humor y emoción genuina. Si traslada esa sensibilidad a Superman, podríamos estar ante algo especial.
La clave será no perder de vista que las mejores historias de Superman son sobre humanidad. Brainiac puede ser perfecto para explorar eso: un ser que perdió toda conexión humana enfrentándose al alienígena más humano de todos.
Una secuela centrada en la familia, con Brainiac como antagonista y un enfoque que abraza lo épico y lo íntimo, suena exactamente como lo que necesitábamos. Las señales son alentadoras, y después de tantos intentos fallidos, eso sí merece celebración.