• DC Studios maneja tres nombres fascinantes para Brainiac: Claes Bang, Matt Smith y Sam Rockwell, cada uno prometiendo una interpretación completamente distinta del villano.
• Después de décadas viendo a Lex Luthor en pantalla, es hora de que el Coleccionador de Mundos tenga su momento cinematográfico, algo que debería haber pasado hace años.
• La apuesta por efectos prácticos y maquillaje extenso sugiere que Gunn entiende la importancia visual del personaje, aunque el presupuesto podría ser determinante.
Hay algo casi surrealista en el hecho de que tengamos que esperar hasta 2027 para ver a Brainiac en el cine. Hablamos de un villano creado en 1958 que ha sido pilar fundamental del universo Superman durante más de seis décadas.
Mientras Lex Luthor ha monopolizado las pantallas desde los tiempos de Gene Hackman, Brainiac se ha quedado relegado a las series animadas y los cómics. Es una de esas decisiones de Hollywood que nunca he terminado de entender.
James Gunn parece decidido a corregir esta injusticia histórica. Y la lista de candidatos que maneja DC Studios no podría ser más intrigante.
Los Tres Mosqueteros del Mal
Claes Bang es quizás la opción más obvia, pero no por ello menos acertada. Su Drácula en la serie de la BBC tenía esa mezcla perfecta de sofisticación aristocrática y amenaza latente que Brainiac necesita.
El danés tiene esa presencia física imponente que el personaje requiere. Brainiac no es solo intelecto; es intimidación pura, y Bang sabe proyectar esa superioridad casi natural.
Matt Smith representa la jugada más arriesgada y, posiblemente, la más brillante. Verle pasar del Doctor benevolente al Coleccionador de Mundos sería un giro fascinante.
Su experiencia interpretando alienígenas superinteligentes es innegable. Pero lo realmente interesante sería ver cómo invierte esa calidez característica del Doctor en algo frío y calculador.
Su trabajo en «House of the Dragon» demostró que puede manejar personajes moralmente complejos. Brainiac necesita esa complejidad para no convertirse en un villano genérico.
Sam Rockwell es la carta más inesperada de la baraja. Y precisamente por eso podría ser la más acertada.
Rockwell tiene esa capacidad única de encontrar humanidad en personajes aparentemente despreciables. Imaginar a Brainiac con esa versatilidad actoral abre posibilidades narrativas que van mucho más allá del típico «alienígena malvado».
El Desafío de los Tentáculos
Gunn ha confirmado que apostarán por maquillaje y prótesis extensas. Es una decisión inteligente que demuestra que entiende al personaje.
Los mejores villanos de superhéroes funcionan cuando el actor puede interactuar físicamente con su entorno. El CGI tiene su lugar, pero nada sustituye la tangibilidad de los efectos prácticos.
Crear esa cabeza alargada icónica y esos tentáculos característicos será todo un reto técnico. Pero si algo hemos aprendido de décadas de cine de superhéroes es que el diseño visual puede hacer o deshacer a un villano.
La búsqueda de actores con «complexión fuerte» también tiene sentido. Brainiac debe resultar creíble como amenaza física para Superman, no solo intelectual.
Presupuesto vs. Ambición
Las restricciones económicas mencionadas en los rumores no me sorprenden. Gunn y Safran han sido claros sobre la necesidad de ser más estratégicos con los recursos.
Pero aquí hay una lección que el propio DC ha enseñado repetidamente: no siempre el actor más caro es el más acertado.
Algunos de los mejores villanos del género han surgido de elecciones aparentemente arriesgadas. Heath Ledger como Joker era controvertido en su momento. Tom Hiddleston no era una estrella cuando fichó por Loki.
Una Deuda Pendiente de 65 Años
Es casi embarazoso admitir que Brainiac nunca haya tenido su momento cinematográfico. Especialmente cuando personajes menos icónicos han recibido tratamientos múltiples.
Quizás era cuestión de timing. Brainiac requiere un equilibrio delicado entre ciencia ficción y drama personal. Gunn ha demostrado en «Guardianes de la Galaxia» que sabe cómo hacer relevantes emocionalmente a personajes cósmicos.
Su experiencia combinando elementos fantásticos con historias humanas sugiere que entiende cómo evitar que Brainiac se convierta en una amenaza abstracta.
Más Allá del Villano de Turno
Lo que realmente me emociona de esta noticia es que sugiere una comprensión profunda del personaje. Brainiac no puede ser simplemente «el alienígena malo de esta película».
El Coleccionador de Mundos funciona mejor cuando representa algo más profundo: la frialdad de la lógica pura, la arrogancia del conocimiento sin sabiduría.
Es la antítesis perfecta de Superman. Donde Clark representa la humanidad elevada a su máximo potencial, Brainiac encarna la perfección sin alma.
Cada uno de los actores rumoreados aportaría matices únicos a esta dinámica. Bang la gravitas clásica, Smith la complejidad psicológica, Rockwell la imprevisibilidad.
El Futuro del Universo DC
Esta decisión de casting será definitoria para el tono del nuevo universo de Gunn. Con opciones tan diversas sobre la mesa, la elección final nos dirá mucho sobre la dirección que quiere tomar.
Después de años viendo las mismas dinámicas repetirse, la perspectiva de algo genuinamente fresco resulta prometedora.
Sea quien sea el elegido, lo importante es que finalmente veremos a uno de los grandes villanos de DC recibir el tratamiento que merece. Después de 65 años esperando, Brainiac está a punto de demostrar por qué ha sido una amenaza constante en los cómics durante tanto tiempo.
Y francamente, ya era hora.

