¿Recordáis cuando Warner Bros. decidió enterrar Coyote vs. ACME como si fuera un cadáver incómodo? Pues resulta que los muertos a veces resucitan, y esta vez lo han hecho por todo lo alto en la Comic-Con.
• Coyote vs. ACME ha mostrado sus primeras imágenes en Comic-Con tras meses de incertidumbre sobre su futuro
• Warner por fin ha entendido que tenía oro entre las manos y casi lo tira por el váter
• La película mezcla acción real con animación y llegará a los cines el 28 de agosto de 2026
Después de meses de silencio sepulcral y rumores de cancelación, la película ha vuelto con fuerza, trayendo consigo las primeras imágenes oficiales y una fecha de estreno que nos tiene a todos con el corazón en un puño.
La ironía es deliciosa: una película sobre un coyote que demanda a una corporación por productos defectuosos, salvada in extremis de las garras de otra corporación que casi la mata antes de nacer. Si esto no es cine dentro del cine, que venga alguien y lo vea.
Porque cuando una major casi entierra tu proyecto y luego lo resucita en el evento más importante del año, sabes que estás ante algo especial.
El panel de Comic-Con arrancó con una broma que dolía de lo real que era: una orden de cese y desistimiento falsa, porque «esta era la película que ACME no quería que vieseis». Qué manera de empezar. Pero lo que vino después fue puro espectáculo.
Nos mostraron tres clips que prometen convertir esta película en algo grande. El primero es una reflexión del Coyote repasando todos sus planes fallidos mientras suena «Hurt» de Johnny Cash.
Tío, si eso no te remueve algo por dentro, es que tienes el alma de cartón. Ver a Wile E. Coyote en plan introspectivo, analizando décadas de fracasos épicos, es el tipo de profundidad emocional que no esperabas pero que necesitabas.
El segundo clip nos lleva directamente al meollo del asunto: la sala del tribunal. John Cena y Luis Guzmán protagonizan una escena de puro caos legal donde presentan las «pruebas» de los productos defectuosos de ACME.
Imagínate: dinamita que no explota, cohetes que van hacia atrás, yunques que caen en el momento equivocado. Es como ver una versión judicial de los mejores gags de los Looney Tunes.
Pero la joya de la corona llega con el tercer clip: una misteriosa llamada telefónica de Bugs Bunny ofreciendo ayuda con el caso. Ese conejo siempre aparece cuando menos te lo esperas, y su cameo promete ser épico.
La química entre los personajes clásicos y los actores de carne y hueso parece funcionar a las mil maravillas.
Will Forte completa un reparto que sobre el papel suena genial. La mezcla de acción real con animación siempre es un terreno resbaladizo, pero cuando se hace bien, el resultado puede ser espectacular.
Y por lo que hemos visto, estos tíos saben lo que se hacen.
El panel no estuvo exento de drama teatral. Los supuestos abogados de ACME interrumpieron la presentación en varias ocasiones, manteniendo la broma meta que atraviesa toda la película.
Es marketing inteligente, de esos que te hacen sonreír mientras te venden el producto.
La fecha del 28 de agosto de 2026 puede parecer lejana, pero después del calvario que ha vivido esta película, casi es un milagro que tenga fecha. Warner estuvo a punto de cargársela por completo, y ahora la presenta como si fuera su niña bonita.
Las vueltas que da esta industria.
Lo que más me emociona es ver cómo respetan el espíritu original de los Looney Tunes sin caer en la nostalgia barata. El Coyote sigue siendo el mismo perdedor épico de siempre, pero ahora tiene una causa justa: demandar a la empresa que le ha estado vendiendo productos defectuosos durante décadas.
La promesa de más cameos de personajes clásicos tiene a todo el mundo con las expectativas por las nubes. Si Bugs Bunny está ahí, ¿quién más aparecerá?
¿Daffy Duck como abogado de la defensa? ¿Porky Pig como juez tartamudo? Las posibilidades son infinitas y todas suenan geniales.
El tráiler que casi nos enseñaron pero que cortaron dramáticamente fue el toque final perfecto. Nos dejaron con ganas de más, que es exactamente lo que tiene que hacer un buen marketing.
Efectivo, pero nos deja con el gusanillo.
Después de años viendo cómo Warner destroza franquicias con la sutileza de un martillo pilón, es refrescante ver que a veces, solo a veces, las cosas salen bien. Coyote vs. ACME tenía todo para convertirse en otra víctima más de los ejecutivos sin alma.
Pero ha conseguido sobrevivir y promete ser la sorpresa del año.
Agosto de 2026 no puede llegar lo suficientemente rápido. Esta película tiene todo lo necesario para demostrar que cuando respetas el material original y le das el presupuesto adecuado, la magia puede ocurrir.
El Coyote se merece su momento de gloria, y nosotros nos merecemos una película que nos haga reír sin insultar nuestra inteligencia. Que empiece ya la cuenta atrás, porque esto va a ser épico.