• Las primeras reacciones de Supergirl: Woman of Tomorrow sugieren que James Gunn ha acertado adaptando la compleja visión cósmica de Tom King en lugar de optar por una historia de origen convencional.
• Esta apuesta por una Supergirl más madura y traumatizada podría ser el golpe de efecto que necesita el DCU para diferenciarse tanto del enfoque de Snyder como del realismo de Nolan.
• Con Jason Momoa reinventándose como Lobo y Milly Alcock liderando una aventura galáctica, la película promete ser tan arriesgada como necesaria para este nuevo universo.
Después de décadas siguiendo las idas y venidas del universo DC en pantalla, desde el gótico de Burton hasta el maximalismo de Snyder, pasando por el pragmatismo de Nolan, hay algo refrescante en ver cómo Gunn está construyendo su DCU. Y Supergirl: Woman of Tomorrow parece ser la pieza que mejor define hacia dónde quiere llevar este nuevo enfoque.
Las primeras reacciones que están filtrándose desde la industria apuntan a que Craig Gillespie ha logrado algo especial. No me sorprende: cuando tienes material fuente tan sólido como la obra de King y Evely, y un productor ejecutivo que entiende que los cómics pueden ser tanto espectáculo como literatura, las posibilidades se multiplican.
Los primeros ecos suenan prometedores
Los rumores que circulan por redes y fuentes cercanas a la producción coinciden en algo: la película funciona. David Krumholtz, que interpreta a Zor El, ha confirmado que mantiene una fidelidad notable a la novela gráfica original. Y eso es crucial, porque estamos hablando de una historia que presenta a Kara como una superviviente endurecida, alguien que carga con traumas que Superman, criado entre algodones terrestres, nunca experimentó.
Es fascinante ver cómo Gunn está apostando por la complejidad emocional donde otros habrían optado por lo seguro. Recuerda un poco a cuando Nolan decidió que Batman podía ser realista sin perder su esencia, o cuando Snyder apostó por un Superman conflictuado. La diferencia es que aquí parece haber encontrado el equilibrio perfecto entre respeto al material y accesibilidad.
La elección de Milly Alcock también parece estar dando frutos. Después de verla en House of the Dragon, esa mezcla de vulnerabilidad y fiereza que aporta encaja perfectamente con lo que necesita esta versión más madura de Supergirl.
Una apuesta que podría redefinir el DCU
Lo que más me llama la atención es cómo estas reacciones confirman que Gunn no está jugando sobre seguro. Adaptar Woman of Tomorrow en lugar de una historia de origen tradicional es valiente. Es el tipo de decisión que habla de confianza tanto en el material como en la audiencia, algo que no siempre hemos visto en las anteriores iteraciones de DC.
Jason Momoa como Lobo añade otra capa fascinante. Verle pasar de Aquaman a uno de los antihéroes más brutales del universo DC promete ser un ejercicio de reinvención actoral interesante. Lobo es pura irreverencia violenta, y si Momoa logra capturar esa esencia manteniendo el equilibrio tonal, estaremos ante algo memorable.
La historia sigue a Kara en una misión de venganza cósmica junto a Ruthye, lo que sugiere que no temen explorar temas más oscuros. Es exactamente el tipo de enfoque que podría diferenciar este DCU de todo lo anterior, desde el camp de Schumacher hasta el simbolismo religioso de Snyder.
El momento perfecto para mostrar cartas
Con el CCXP acercándose, las expectativas por el primer tráiler están disparadas. Y tiene sentido: Brasil siempre ha sido territorio DC, y estos eventos suelen ser el escaparate perfecto para material que genere conversación global.
Si las reacciones tempranas son indicativas de la calidad final, este primer vistazo podría ser cuando el DCU de Gunn empiece a sentirse real para el gran público. Hasta ahora hemos tenido declaraciones de intenciones, pero Supergirl: Woman of Tomorrow representa la primera gran apuesta creativa del nuevo régimen.
La fecha de estreno del 26 de junio de 2026 también es estratégica. Llegará después de que Superman establezca el tono, pero lo suficientemente pronto para mantener el impulso y demostrar que este universo tiene historias variadas que contar.
Lo que más me emociona es que estas reacciones sugieren que Gunn entiende algo fundamental: no se trata solo de hacer buenas películas de superhéroes, sino de crear un universo con identidad propia. Después de años viendo cómo DC intentaba encontrar su camino entre el realismo, el maximalismo y la nostalgia, Supergirl: Woman of Tomorrow podría ser la prueba de que este nuevo enfoque no teme la complejidad emocional.
Si estas impresiones se confirman, estaremos ante una de esas películas que no solo funcionan por sí solas, sino que ayudan a definir la identidad de todo un universo. Y después de tantos falsos comienzos, eso es exactamente lo que DC necesita para reconquistar tanto a los fans como al público general.

